En Nueva Zelanda, el Ministerio de Salud publica informes anuales sobre la calidad del agua potable y sobre el cumplimiento de estándares, que muestran el significado de las reformas gubernamentales en esta importante área de salud pública. La publicación de su Informe anualsobre la calidad del agua potable 2017-2018, por ejemplo, incluye información sobre suministros individuales, lo que proporciona un panorama general de la calidad del agua y los riesgos asociados. El informe refuerza las recomendaciones clave de la investigación a raíz de un brote de gastroenteritis de Havelock North en 2016; en esa ocasión, se enfermaron más de 5000 personas. La investigación detectó un fallo sistémico generalizado de los proveedores de agua potable.

El Ministerio de Salud, el Ministerio de Medioambiente y el Ministerio de AsuntosInternos han seguido impulsando mejoras, incluida la aplicación de las 51 recomendaciones de la investigación. El informe que se elaboró como consecuencia de esta situación contiene información sobre la calidad del agua potable de todos los suministros registrados y conectados a la red que abastecen a poblaciones de más de 100 personas desde el 1 de julio de 2017 hasta el 30 de junio de 2018, lo que abarca a 3 839 000 personas. Gracias a una recomendación de la investigación, el formato ha cambiado para mejorar la claridad y la accesibilidad, y se destacan los incumplimientos.

En el Reino Unido, el Cuerpo de Inspección de Agua Potable (DWI, por sus siglas en inglés) publica informes trimestrales y anuales de acceso público que evalúan la calidad del agua potable a escala nacional desde la perspectiva del inspector principal del DWI. Los informes abordan las pruebas y los resultados de la calidad del agua, la confianza de la población en el agua potable, y eventos y actividades de auditoría técnica. También contienen un resumen de todoslosresultados del programa de muestrasregulatores de las empresas de suministro de agua y una lista de todas las advertencias y procesamientos llevados a cabo por el DWI.

En Perú, el Reglamento de la Calidad del Agua para Consumo Humano DS N.º 031-2010-SA, entre otros aspectos, busca normar la difusión y acceso a la información sobre la calidad del agua para consumo humano, estableciendo el derecho a la información sobre la calidad del agua consumida como un lineamiento normativo, pudiendo el usuario acceder a la información sobre la calidad del agua en forma gratuita y oportuna. A tal efecto, el prestador tiene la obligación de suministrar a la Autoridad de Salud y al órgano de control toda información vinculada con el control de calidad del agua, con carácter de declaración jurada. A partir de ello, se establece dentro de las funciones de la autoridad sanitaria la de consolidar y publicar la información de la vigilancia sanitaria del agua para consumo humano en el país, debiendo normar, organizar y administrar el Sistema Nacional de Información de la vigilancia sanitaria del agua para consumo humano.

En México, la Ley de Aguas para el Estado de Jalisco, dictada con el objeto –entre otros- de establecer las bases generales para la prestación de los servicios públicos de agua potable, drenaje, alcantarillado, tratamiento y disposición final de las aguas residuales, establece un Sistema Estatal de Información del Agua como instrumento público de acceso a la ciudadanía en los términos que establece la Ley de Transparencia e Información Pública del Estado de Jalisco y la Ley Federal de Transparencia y Acceso a La Información Pública Gubernamental. Dicho Sistema reúne el conjunto de información pública relacionada con el agua del Estado de Jalisco -incluyendo la de los sistemas de agua potable y saneamiento-, estipulándose que será pública la información contenida en el sistema estatal de información, permitiendo el acceso a la información referida a todo interesado.

En Uruguay, la prestadora Obras Sanitarias del Estado (OSE) permite el acceso on line a los datos relevantes sobre calidad del agua potable provenientes de los análisis realizados por el Sistema Integrado de Gestión de Laboratorios de OSE (SIGLA) organizados trimestralmente por Departamento y Localidad, detallando la cantidad de muestras analizadas, los parámetros analizados, las referencias normativas y el porcentaje de muestras que cumple/incumple la norma.